11 feb 2015

Sueño en la otra vida

Ya no queda ira en mi,
ya no queda inspiración en mi mente,
vacío de musa,
Carente de sed.

Demasiado tiempo buscando
para nunca encontrar,.
La vida se pasa,
la arena del reloj cae,
Y la búsqueda no tiene sentido.

Resignar los sueños,
es la naturaleza del ser.
Adecuarse a lo impuesto,
es la única fuente de felicidad.

No busques ser más de lo que ya eres,
Salvo que quieras tu corazón partido
y tu alma derrotada.
Esperando la próxima vida,
para volver a soñar otra vez.


4 nov 2014

Nunca

Era un niño, soñando nada más,
buscando lo que cualquiera busca.
Ilusionado con lo que vendría,
el susurro de los ángeles en mi oído.

No hay piedad para el dolor,
el suspiro de sus alas se desvaneció,
las lágrimas han ganado su lugar,
me dejan ciego ante la inmensidad.

La oscuridad de la noche
ahogó mis sueños,
su manto opacó a las estrellas.
Noche para siempre.

Nunca es mucho tiempo,
nunca se realizaron mis sueños,
la mentira fue creciendo,
me carcome por dentro.

La ilusión se convirtió en frustración,
me transformó en este oscuro hombre que soy.
Soledad y tristeza a cada paso.
Nunca es demasiado tiempo.



14 oct 2014

Siempre se vuelve al primer amor...Roxette

Siempre se vuelve al primer amor, Roxette, les dejo un par de temas...relájense y disfruten, son temas tranquilos, para escuchar con luz tenue....

"So Far Away", uno de mis favoritos, siempre me transportó este tema....


Otro tema, no muy conocido de Tourism, "Never Is a Long Time" lo escuché por primera vez en casette allá por 1993 ó 1994, con 13 ó 14 años, y lo amé desde el primer momento en la soledad de mi habitación...




Y les dejo una Per para compensar...Cinnamon Street....uno de mis favoritos...




La amistad está muerta.

La amistad no existe, es una creación sobrevaluada del hombre, por lo menos a medida que pasan los años va perdiendo su autenticidad.
Cuando sos niño/adolescente existen los verdaderos amigos, ya que no hay intereses en juego, no hay elementos ocultos que envenenen una relación.
A medida que uno va creciendo, va perdiendo esas amistades "verdaderas", tenés suerte si te quedan una o dos en tu vida.
Cuando creas una amistad de adulto, no es la misma que cuando uno la concibe en la adolescencia. Siempre está contaminada por ventajas, dinero, relaciones, poder, interés, etc. ya no existe en su estado puro. Ya no sos amigo de alguien por simple afinidad, se necesita algo más. Y aún cuando tengas cierta conexión emocional con esa persona, si el elemento de interés desaparece o se altera, cambia la ecuación de la amistad hasta el punto que puede degradarla o diluirla para siempre.
Personas que yo consideraba "amigos" no lo eran, nunca lo fueron. Soy un idealista soñador que todavía piensa que alguien puede crear una relación de amistad de cero a mi edad sin tener que estar pensando en otros factores que los demás si consideran.

Cuando he estado en una posición de cierto poder o prestigio, cuando era líder de grupo o me destacaba en mi trabajo anterior, era el centro, era el que tenía "amigos", íbamos a tomar una cerveza, nos hablábamos por teléfono. Con el tiempo, cambié de trabajo, estoy en un escenario totalmente distinto y esas "amistades" han desaparecido. Estoy de acuerdo que ya no se comparte el día a día pero alguien hace poco me dijo, "la amistad solo requiere organización y voluntad", es cierto, la verdadera amistad requiere este esfuerzo. No todos estamos dispuestos a hacerlo, sobre todo si la "amistad" no es real.
Yo he hecho este esfuerzo con personas que consideraba que valían la pena para mí, que eran parte de mi ser, eran mis amigos....debo admitir la la mayoría de las veces ha sido en vano. Uno termina por dejar de intentar, dejar de sentir que mendiga un poco de cariño, porque se convierte en eso, en un rogar permanente para que no te olviden, para que estén en tu vida cuando más los necesitas, para que te den el abrazo que tanto extrañás, se convierte en un desperdicio de tiempo y energía por algo en lo que creías real y te das cuenta que sólo era una ilusión.

Hoy mi realidad es distinta, no estoy en una situación de poder, ni soy líder de grupo y aquí estoy, solitario, las personas que se acercan son por la poca conveniencia que puedan tener y luego se alejan...Nadie tiende a escucharte a no ser que puedan obtener algo a cambio. Te sonríen mientras eso les sirva para algo, y luego te desechan, una vez cumplida la obligación, no tenés razón de ser.

La amistad no existe, es un concepto sobrevaluado en el mundo. La verdadera amistad requiere organización y voluntad...pero también agregaría que necesita algo más importante, algo que motive esos dos conceptos, necesita amor, y en este mundo, el amor sólo se reserva a los niños. Los adultos tienen prohibido demostrarlo a los demás, sentirlo por lo demás, es la única explicación que encuentro a la burda idea de "amistad" que tenemos hoy en día.

La amistad ha muerto, me pregunto si alguna vez podré pensar de otra manera...

7 oct 2014

Volver....

Lo que daría por volver,
desearía poder salir corriendo,
huir en el tiempo,
donde podía pensar....

Retroceder a donde podía contemplar el sol,
sentarme en el césped,
y mirar al cielo azul,
y pensar,
y soñar,
y creer...

Sentarme a escribir,
sólo pensar en nada,
olvidarme del tiempo,
olvidarme del mundo,
ser yo mismo por un rato.

Dejar que el sol pase entre las hojas hasta mí.
Sentir el viento acariciarme la cara,
no saber que exista otra vida,
ser en ese instante, no existe nada más...

Tener el tiempo,
tener la creatividad toda para mí,
para disfrutarla,
para contemplarla.

Ser feliz como entonces,
disfrutar del tiempo para mí,
no ser un esclavo más.

No sentirme un paria,
un extraño en el mundo,
sentir calma en mi soledad
y no ansiedad en compañía.

Ser importante otra vez,
no ser un número más en la cabeza de los demás.
Aquí existo,
pero allí es donde vivo,
es donde soy.

Cómo quisiera poder volver atrás,
volver a esas mañanas tranquilas de sol,
a esos árboles que me acompañaban,
a esa hoja en blanco que me esperaba,
a esa compañía que era mi soledad....



6 oct 2014

"Mace!" - una de mis primeras historias escritas -

He encontrado un verdadero tesoro para mí, una de las primeras historias que escribí, allá por el año 1995 aproximadamente. Decidí transcribirla aquí para preservarla. No es una obra maestra, ni nada por el estilo, pero me gustó lo que traté de hacer aquí con mis 15 años....
Espero la disfruten...con ustedes..."MACE!":


Domingo, 5 de abril de 1959
                Hoy decido escribir lo que me ha estado sucediendo en las últimas noches. No he podido contárselo a nadie y, tal vez, de esta forma pueda liberar un poco la preocupación de mi mente.
                Me encontraba recostado en mi cama, una noche tormentosa, los relámpagos se proyectaban sobre mi ventana. Me sumergía en mis pensamientos en la oscuridad; lo que me había sucedido ese día, mi novia, entre otras cosas… Estaba comenzado a dejarme vencer por el sueño cuando, sin aviso, mis pensamientos cambiaron completamente. Empecé a contemplar horribles imágenes en mi mente, personas gritando, grandes y deformes rostros se cruzaban flotando en una tormenta de fuego, parecían pedir ayuda. Exaltado, abrí mis ojos, observé tan solo oscuridad, solo rota por el resplandor de algunos lejanos relámpagos, me tranquilicé un poco y pude conciliar el sueño, no sin dificultad.
                En las dos noches siguientes el hecho se repitió, lo extraño es que aún la tormenta no se disipaba y parecía recobrar fuerza durante la noche.
                En la tercera noche, no pude dormir, esos pensamientos e imágenes que no podía controlar aparecían con más realismo cada vez pero, al abrir los ojos, desaparecían.
                En la siguiente noche, no pude resistir el cansancio y me dormí, a pesar de esas imágenes en mi mente, lo que pasó después aún no sé si fue sueño o realidad. Me despertaba en medio de la noche, me sentaba en mi cama con la habitación a oscuras, un ruido extraño me había hecho abrir los ojos. Era similar a algo entre pasos y pequeños golpes hechos sobre alguna clase de instrumento de madera, pero por alguna razón me pareció que componían una melodía un tanto siniestra. Me levanté de mi cama, no sin sudar de terror, y abrí la puerta de mi dormitorio…vi algo…una figura humana o casi humana, no la puedo recordar debido a que apenas la divisé me encontré nuevamente en mi cama, sudoroso y agitado. En ese momento, supuse que había sido una pesadilla.
                Esto sucedió hace unas semanas atrás, desde entonces este sueño ha ocurrido esporádicamente casi sin cambios.

Martes, 14 de abril de 1959
Hoy vuelvo a escribir porque anoche fue totalmente escalofriante.
Me encontraba en mi cama, cerca de la medianoche, disfrutaba de la lectura de uno de mis libros favoritos, Crucifax, bebiendo una taza de café, cuando estaba dispuesto a abandonar la historia contada por el autor, algo me inquietó. De repente comenzó a llover intensamente, los relámpagos iluminaban la habitación como pocas veces. Me levanté a cerrar mi ventana, me aproximé a ella, al ver hacia la calle divisé, bajo el manto de agua que caía, una figura al otro lado de la acera. Me pareció familiar y me observaba, no podía distinguir su rostro pero, de alguna forma, sus ojos me inquietaron. Rápidamente bajé la persiana y me recosté tratando de no darle importancia a la que seguramente había sido una invención de mi imaginación. Unos minutos después alguien golpeaba mi puerta, supuse que sería mi madre. Me levanté en la oscuridad y la abrí, para mi asombro y desconcierto, no había nadie allí. Me volteé para volver a mi cama y allí estaba, parado frente a mí, esa persona de la calle goteando el agua de lluvia que aún tenía en el piso de mi habitación. Era alto, casi de dos metros de altura, con largos cabellos cenizas, ojos color fuego y vestido con un sobretodo negro que lo cubría hasta los pies. Quedé paralizado…pero al mirarlo a los ojos un extraño sentimiento de tranquilidad se apoderó de mí.  Estuvimos unos segundos, que a mi parecer fueron horas, hasta que finalmente pude hablar. Le pregunté que quién era, que qué hacía en mi habitación. Se tomó su tiempo para contestar, pareció una eternidad, me dijo, con voz ronca y lejana: “Soy tu amigo, un buen amigo, tú me has llamado y lo sabes.” No supe a qué se refería y de repente, mi mente se iluminó y recordé al diabólico personaje de mi libro, Mace, el que lograba dominar a los jóvenes presentándose como su “amigo”. Con voz temblorosa le pregunté si él era Mace y…se fue, simplemente desapareció dejando un extraño aroma en el aire, un aroma muy similar al de la marihuana.